HISTORIA DEL JOVEN CELOSO

   Habia una vez un hombre joven que estaba muy celoso de una joven muchacha bastante voluble.
   Un día le dijo: "Tus ojos miran a todo el mundo". Entonces, le arrancó los ojos.
   Después le dijo: "Con tus manos puedes hacer gestos de invitación". Y le cortó las manos.
   "Todavía puedes hablar con otros", pensó. Y le extirpó la lengua.
   Luego, para impedirle sonreír a los eventuales admiradores, le arrancó todos los dientes.
   Por último, le cortó las piernas. "De este modo -se dijo- estaré más tranquilo".
   Solamente entonces pudo dejar sin vigilancia a la joven muchacha que amaba. "Ella es fea - pensaba- pero al menos será mía hasta la muerte".
   Un día volvió a la casa y no encontró a la joven muchacha:  ella había desaparecido, raptada por un exhibidor de fenómenos.

SONETO

Bendecidos el año, el mes, el día
y la estación y el sitio y el instante
y el hermoso país en que delante
de tu mirar mi voluntad rindo.

Y bendita la tenaz porfía
de amor entre mi pecho palpitante,
y el arco y la saeta y la sangrante herida

Que en mi corazón se abre.


Bendita la voz que repitiendo
va por doquier tu nombre,
suspiros, ansias, lágrimas vertiendo.

Y bendita todo cuanto escribe mi mente

que al loarte consagrada
en ti y sólo para ti vive

EMPIEZO A QUERETE


Empiezo a quererte por mi deseo involuntario de querer esperarte, de seguir soñando a tenerte, por el anhelo de mirarte y perderme y encontrarme de nuevo, como en esas historias sin fin, donde todo comienza justo cuando acaba. Empiezo a quererte digo por no encontrar razones para no hacerlo, porque no existen excusas si de quererte se trata, por mí fuera no quererte si no existieras, pero hace mucho descubrí que existes y eso me obliga a quererte, en una de las más bellas condenas a la que me veo sometido. Empiezo a quererte desde que olvidé que me gustabas, porque amarte sólo por tu belleza sería amar superficialmente, mejor amarte con los ojos cerrados y descubrirte verdaderamente con mis demás sentidos. Amo tu nombre y todo lo que en él encierras.

INSTRUCCIONES PARA ESPERAR EN EL TIEMPO


Empiece por olvidar lo que ya conoce de su futuro y sonría plácidamente.
Si tiene el calendario maya colgado en su cuarto, tírelo y desconfíe de la cultura popular, pues el fin llega sólo con la muerte. Por ningún motivo deje entrar el pesimismo en su cabeza, si por descuido sucede, espántelo como se espanta un testigo de jehova con un lindo traje escocés. Detenga el pulso del reloj de mano, el de pared, el de la cocina, el de la iglesia del pueblo y todo el que más pueda, le ayudará a confundir al sol y la luna, rompa todos los calendarios del mundo así los días serán iguales. Si la espera aún se hace eterna váyase a vivir al planeta Mercurio y devuelva de una vez por todas el tiempo de los demás.

A TI


Que cante o escriba, mis dos sensibilidades